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Cenizas del paraíso

6 Feb

«Ver un asesinato por televisión puede ayudarnos a descargar los propios sentimientos de odio. Si no tienen sentimientos de odio, podrán obtenerse en el intervalo publicitario.»

Alfred Hitchcock

 

 

Cenizas del paraíso

 

       Año: 1997.

       Director: Marcelo Piñeyro.

       Reparto: Héctor Alterio, Cecilia Roth, Leonardo Sbaraglia, Daniel Kuzniecka, Nicolás Abeles, Leticia Brédice.

       Tráiler

 

 

           Para su tercera película, el argentino Marcelo Piñeyro repite equipo con sus habituales Aída Bortnik en el guión y Héctor Alterio y Leonardo Sbaraglia en el reparto, a los que se suma otra de las actrices más exportadas del país, Cecilia Roth.

           Tras pasar por el biopic musical-romántico y la road-movie, Piñeyro trata en Cenizas del paraíso de componer un thriller muy a la americana pero de indiscutible sabor argentino. Es una película que empieza sin concesiones, con la presentación de sus protagonistas al límite de la desesperación, y tras lo cual desarrolla ya la trama, la investigación de la juez Teller (Cecilia Roth) asesinato de la bella joven Ana Muro (Leticia Brédice) del que su novio (Nicolás Abeles), así sus dos hermanos (Sbaraglia y Daniel Kuzniecka), se empeña en declararse culpable. Un crimen que se entremezcla con el presunto suicidio del padre de los acusados (Alterio), un juez que investigaba por corrupción justamente al padre de la asesinada.

Tal y como parece, es un argumento en el que se entremezclan enrevesadas pasiones, ambiciones y corruptelas pero tratado con corrección y en el que la intriga se va dosificando a cuentagotas por medio de un guión meritorio que toma prestada la estructura formal que inventó Akira Kurosawa en Rashomon, es decir, la narración de un hecho desde los puntos de vista de los implicados, una estructura arriesgada que si bien puede resultar dinámica al romper la linealidad del discurso, cuenta con el riesgo de resultar repetitiva. A pesar de estas virtudes, a las que se suma un buen nivel interpretativo general, sobre todo por parte de Roth y Alterio; la película, que funciona mejor como thriller sentimental que como thriller judicial, acaba por acusar un metraje excesivo que hace decaer el interés por momentos y una banda sonora con pasajes realmente desafortunados, a veces casi propios del cine X. Aún así, el principal fallo del film es, en mi opinión, que la femme fatale encarnada por Leticia Brédice, punto de unión entre los conflictos pasionales y los judiciales, queda finalmente como un personaje un tanto desdibujado.

           Podría habérsele sacado aún más jugo.

 

Nota IMDB: 7,5.

Nota FilmAffinity: 7,5.

Nota del blog: 6.